Consuelo Bertomeu, la primera florista de la comarca
Cuando una cosa es bella de por sí misma, y al mismo tiempo se le combinar con multitud de formas y colores, esto se convierte en arte, y nadie mejor que Consuelo Bertomeu, una olivera de 83 años, afincada en Denia desde el año 40, para realizar este trabajo. Consuelo Bertomeu comenzó este trabajo desde muy temprana edad. Aprendiendo este oficio en Barcelona donde, según ella. era la Ciudad Condal, donde mejores ramos y centros se confeccionaban en aquella época. Consuelo llega a Denia en el año 1940 tiempos muy difíciles y complicados comentando que en aquellos tiempos en Denia y comarca, no existía ninguna persona que se dedicase a la floristería, ya que las flores que adornaban las casas o llevaban al camposanto eran cultivadas en pequeños jardines de propiedad privada, y que además no se conocían muchas variedades de flores. La florista empezó con su pequeño negocio en su propia casa, pasando más adelante al mercado municipal. En los ojos de esta mujer aparecen, por un momento, unas lágrimas al recordar aquellos años donde había más preocupación por poner aunque fuese un plato de comida al día sobre la mesa. Al llegar la fecha de Todos los Santos, siempre se hacía un gran esfuerzo para llevar unas flores al cementero; a esta veterana florista le ayuda en todo momento su hija, Consuelo Martínez, que junto con su marido el polifacético Pepe Llorca, actor, cantante poeta y artista floral, consiguen no sólo mantener el negocio, sino llevarlo más lejos ya que en su floristería Hortiflor, del Marquesado, en Denia. realizan con todo primor los preciosos ramos de novia, centros, adornos para la iglesia. así como diversas coronas. Consuelo Martínez manifestaba a LAS PROVINCIAS que aunque parezca mentira, éste es un trabajo muy duro, ya que para que un ramo salga perfecto se necesitan muchas horas de trabajo e imaginación, así como tener el máximo de cuidado ya que como hoy en día se trabaja con flores muy bonitas pero muy delicadas, al mínimo descuido estropeas el trabajo realizado durante horas, también nos comentaba que lo más importante, para un buen trabajo, es la selección de las flores, ya que éstas han de ser siempre de máxima confianza y calidad y hay que ir a buscarlas donde sea.
Clientela amplia y fiel
Pepe Llorca manifestaba a LAS PROVINCIAS que su clientela siempre ha sido muy grande y fiel, ya que en su floristería se atienden que en su día, siendo niñas acompañaron a sus madres y abuelas y hoy son ellos con sus hijos, las que vienen a por las flores y claro, aco as y hoy son ellas con sus hijos las que se llenan de orgullo Pepe nos contaba que en su tienda se atienden clientes de toda la Marina y también reciben encargos de Valencia y Alicante, que ellos mismos se encargan de llevar. Este matrimonio se siente feliz porque su hija, Manolita, continua el negocio familiar.